5 maneras de mantenerse saludable mientras viajamos

Viajar puede tener un alto costo en su salud y bienestar. Si has reservado tiempo libre del trabajo para unas vacaciones, lo último que necesitas es sentirse agotado o enfermarse. Protejer tu salud con estos cinco consejos, para que puedas volver al trabajo sintiéndote relajado o renovada, será fundamental para volver con mucha energía después de las vacaciones.

1. Láverse las manos

Lo has escuchado antes, pero es la forma más efectiva de combatir la propagación de gérmenes y minimizar las posibilidades de enfermarse. Llena tu equipaje de mano con desinfectante para manos para que sea fácil de lavar sobre la marcha. Mete un paquete de viaje de toallitas antibacterianas allí también. Serán útiles para limpiar superficies llenas de gérmenes como las bandejas de los aviones.

2. Beber e hidratarse

Los tiempos de vuelo no deseados, junto con el aire seco de la cabina del avión, pueden ser una receta para la deshidratación, lo que puede hacer que te sientas fatigado, aturdido e irritable. Viaja con una botella de agua grande y reutilizable que puedas rellenar después de pasar por seguridad y tómala a sorbos durante el vuelo en lugar de bebidas deshidratantes como café, refrescos con cafeína o alcohol.

3. No escatimes en dormir

La falta de sueño que acompaña al jet lag puede dejarte cansado, malhumorado y más susceptible a enfermarte. Para aclimatarse rápidamente a las nuevas zonas horarias, intente ceñirte al horario local en lugar de dormir durante el día. Toma una siesta por la tarde si estás realmente agotado, pero no duermas por más de dos horas. Solo hará que sea más difícil conciliar el sueño más tarde.

Pasa tiempo al aire libre cuando sea posible, también. La exposición a la luz solar te ayudará a sentirte más despierto durante el día y más somnoliento por la noche, según la Fundación Nacional del Sueño.

4. Trata de comer bien

Alojarse en hoteles a menudo significa comer en restaurantes, lo que puede significar comidas más pesadas y más alcohol de lo que está acostumbrado en casa. Relajarse un poco es dundamental y disfrutar de algunas de tus comidas y bebidas favoritas, pero encuentra maneras de hacer que la mayoría de tus comidas sean saludables. Por ejemplo, elige opciones ricas en proteínas (como huevos o yogur griego) en lugar de pasteles en el desayuno, o toma como regla, tener siempre una ensalada con proteínas en el almuerzo. Y apégate a solo una o dos bebidas por día.

5. Minimizar el estrés

Lo creas o no, el estrés que a menudo conlleva viajar puede suprimir tu sistema inmunológico y hacerlo más propenso a enfermarse. Dado que no puedes evitar los retrasos en los vuelos, manejar los factores estresantes que puedes controlar tampoco es fácil.

Unos días antes de tu viaje, escribe una lista de verificación de los artículos que necesitas llevar. Crea más espacio en tu maleta enrollando tu ropa en lugar de doblarla. El día antes del viaje, escribe el itinerario de viaje, incluidos detalles como números de vuelo y nombres de hoteles, para tener todos tus planes en un solo lugar. Y confirma cómo llegarás del aeropuerto a tu destino, para que no se veas obligado a apresurarte y que empiecen a aparecer los nervios e imprevistos en el último minuto.

Con unos sencillos pasos, puedes mantener tu energía y sentirte bien cuando estás fuera de casa. Estarás en la cima para lo que sea que te depare el viaje y regresarás al trabajo saludablemente y descansado. Para después pensar en lo bien que has descansado y lo bien que has gestionado todo el preparativo del viaje y durante la estancia, que no ha habido ningún cambio del último momento, y si lo ha habido, seguro que lo has podido afrontar con seguridad y buena forma.

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